Feria

Sevilla, bella y diversa

Esta novísima quesería lleva por nombre El Huerto del Cura, como el terreno en el que se encuentra la finca Pingorro, donde trabajan los dos hermanos que la montaron tras ganar el primer concurso de emprendedores organizado por la mina Cobre Las Cruces.

Esta cooperativa nace por la iniciativa de 10 apicultores del campo andaluz, con la intención de defender y consolidar un producto de calidad y competitivo en el mercado de la miel. Para poder alcanzar este producto de elevada calidad, existen rigurosos controles y un seguimiento total de la miel desde su extracción del panal hasta su consumo final.

La marca El Clavel fue fundada en 1896 en Cazalla de la Sierra, una blanca población situada entre encinas y alcornoques en el centro de la Sierra Morena sevillana. Han inmortalizado su nombre, entre otras cosas, la fama universal de sus destilados de aguardientes, a la cual contribuye desde 1896 el célebre Anís del Clavel.

La bodega, propiedad de José Ignacio Machuca Pimentel, tiene más de 150 años de antigüedad. Conserva utensilios y maquinaria de gran valor histórico, además de un barril cuya antigüedad se remonta casi al inicio de la fundación de la bodega (1864), se encuentra en buen estado y, por supuesto, lleno de vino.

El Museo Bodega El Bodegón es propiedad de Bodegas Blanco S.L., familia de ya varias generaciones dedicadas a la crianza de vinos y vinagres.

En 1927, la compañía inglesa Islas del Guadalquivir S.A. compró 25 000 hectáreas al marqués de Casa Riera con el fin de realizar la desecación y saneamiento de terrenos pantanosos en islas y marismas del río Guadalquivir. El objetivo: propiciar la producción intensiva del arroz.

Aguadulce debe gran parte de su fama a la calidad de sus cultivos. Las habas y judías gozan de tal popularidad que no resultaría extraño que Jack buscara en los campos habichuelas mágicas con las que alcanzar el cielo.