Pinares de Doñana

Espacios naturales

Más de trescientos parajes y reservas naturales

El Chaparro de la Vega

Naturaleza agreste en la zona más alta de la Provincia

La salida y la puesta de sol son espectaculares en el paisaje de montañas, lomas y cultivos de la Sierra Sur sevillana. Enmarcada entre las sierras Subbéticas y el valle del Guadalquivir, la comarca de la Sierra Sur tiene las mayores alturas de la provincia, que albergan grandes pueblos agrícolas y la Ruta de los Castillos, testigos de una naturaleza agreste y de gran riqueza. Podemos encontrar encina, pinar, pastizal y monte bajo característico de tipo mediterráneo. 

En Coripe merece una visita el Chaparro de la Vega, una encina de más de 700 años, con una copa de 23 m, declarada monumento natural.

En la zona de mayor altura de la sierra es posible avistar aves rapaces. También en Coripe, en la Reserva Natural del Peñón de Zaframagón, habita una importante colonia de buitre leonado. No te pierdas la Vía Verde, antigua vía del ferrocarril de 32 km. Vas a disfrutar del paisaje y la naturaleza de la sierra.

El agua también es generosa con esta comarca, creando zonas de especial interés por su fauna y su flora. En Badolatosa los embalses de Cordobilla (catalogado como de importancia internacional para la invernada de la malvasía), en el río Genil y de Malpasillo (catalogado como Paraje Natural) albergan en sus orillas taraje, mimbre, chopo y olmo, densa vegetación ripícola de enea, caña y carrizo. La gran diversidad de hábitats de la zona favorece la ocupación por multitud de especies. Anátidas tales como el pato real, el pato colorado, el azulón y el pato cuchara. Peces como el barbo, la boga y la carpa real. Aves, cada vez más abundantes en la zona, como puedan ser el águila real, el águila perdicera, el ratonero común, el aguilucho cenizo, el gavilán y el halcón peregrino, entre otras. Entre las especies cinegéticas destacan la perdiz roja, la liebre y el conejo. El flamenco rosa y el cormorán grande son dos de las especies invernantes más llamativas de estos parajes en los últimos años. Ambos son zona catalogada RAMSAR, humedal de importancia internacional.

En Martín de la Jara visita la reserva natural de la Laguna del Gosque, un humedal endorreico y de carácter estacional en las proximidades de la Sierra de los Caballos. Forma parte de los corredores ecológicos que componen los humedales de la provincia por lo que podemos disfrutar en ella de avistamientos de flamenco rosa, chorlitejo patinegro, focha común, porrón pardo y cerceta común. Es una zona de invernada y descanso en periodos migratorios, siendo zona de reproducción de la malvasía y de otras numerosas especies acuáticas. Está catalogada como Zona Húmeda de Importancia Nacional. Su carácter salino favorece una vegetación más propia de las marismas que del interior, con presencia de diversas especies botánicas endémicas como la Althenia orientalis, macrófitos acuáticos, etc.

La vegetación perilagunar está compuesta por taraje, carrizo, junco y salicornia, planta adaptada a condiciones de elevada salinidad, que ocupa la orilla norte. La laguna está rodeada por olivares, viñedos y cultivos herbáceos. Entre ellos aparecen algunas zonas pedregosas con especies de matorral bajo con romero, jara blanca y aulaga o matorral alto con coscoja y acebuche. En las zonas de solana se desarrollan espartales.

Y cómo no podía ser de otra manera, las sierras, con la Ruta de los Bandoleros. Montellano con la Sierra de San Pablo y los Tajos de Mogarejo, un escarpe declarado Monumento Natural. La Sierra de la Acebuchosa en Lora de Estepa; el Peñón de Algámitas y la Sierra de Esparteros, en Morón de la Frontera; la Sierra de la Cruz y el Arroyo del Búho en Pedrera. En Pruna nos encontramos el punto más alto de la Provincia de Sevilla, el Pico del Terril (1 129 m) en la Sierra del Tablón. En su cara norte encontramos madroños, encinas, jara, aulagas, etc. En cuanto a la fauna, existe una gran variedad destacando la propia del matorral mediterráneo: búho real, águila culebrera, águila perdicera, cernícalo, paloma torcaz, grajilla, zorcal común, estornino, cogujada montesina, etc. Especies dominantes como la gineta, comadreja y el tejón, junto a conejo, ratón de campo, liebre y perdiz. También abunda el jabalí. Es de destacar la presencia del buitre leonado debido sobre todo a la cercanía de la Reserva Natural del Peñón de Zaframagón, una de las más importantes de la península ibérica de esta especie.