Cascadas del Hueznar

Sevilla enamora

Esta iglesia formaba parte del antiguo convento de los Terceros Franciscanos, un amplio edificio que después de la desamortización de Mendizábal pasó a ser primero cuartel y, en 1952, colegio de los Padres Escolapios.

Sobre una colina de cima aplanada, al norte del cabañal, a unas sesenta varas del viejo camino y junto al asiendo de una cruz de peregrinos de la Edad Media, se levantó sobre cimientos de piedra esta pequeña y graciosa ermita de la primera mitad del siglo XVI.

Antiguo convento de los canónigos del Espíritu Santo. Se tienen noticias del establecimiento del Espíritu Santo desde pocos años después de mediar el siglo XVI. Habitado por la congregación de canónigos, estos se encargaron del mantenimiento de la Casa de Expósitos hasta su exclaustración en el siglo XIX. Su culto está atendido desde 1939 por las Hermanas de la Cruz.

La Cartuja de Cazalla dedicada a la Inmaculada Concepción se encuentra en un lugar idílico cargado de historia, rodeado de bosques, un manantial de agua inagotable y vistas excepcionales. Hay vestigios celtas, fenicios, romanos, musulmanes y cristianos.

El edificio presenta una sola nave, dividida en seis tramos, y cabecera semicircular. Las cubiertas son bóvedas de cañón con lunetos entre arcos fajones, apareciendo una bóveda semiesférica sobre pechina en el antepresbiterio y una bóveda de cuarto de esfera en la capilla mayor.

La Iglesia de San Antonio Abad de Pruna es un espléndido edificio barroco. Su estructura anterior al siglo XVI constaba de una sola nave de cañón, de estilo indefinido, con fachada al fondo (debajo del coro).

El Monasterio de la Encarnación se levantó en 1549 como Hospital de la Encarnación del Hijo de Dios. En 1612 lo ocuparon los jesuitas y en 1626 la IV Duquesa de Osuna funda, en el solar del antiguo hospital, el Monasterio que habían de regir las religiosas de la Real y Militar Orden de la Merced.