Feria

Sevilla, bella y diversa

La Iglesia de San Juan Bautista debió fundarse tras la conquista cristiana de Marchena y podría estar ligada a la presencia de la orden de San Juan en la villa, documentada en el siglo XIII. De esta etapa primitiva sólo queda la capilla que se halla bajo la torre.

Se trata de un templo renacentista (1556-1588) que no olvida la tradición gótico-mudéjar. Perteneció al antiguo colegio de la Encarnación de padres jesuitas, fundado por Luis Cristóbal Ponce de León (II duque de Arcos) y su mujer María de Toledo. Del primitivo colegio hoy sólo se conservan la iglesia y un precioso claustro.

La verdadera advocación de este templo es la de San Pedro Mártir, aunque por haber pertenecido a la Orden Dominicana tradicionalmente se llama de Santo Domingo. Formó parte del convento fundado en 1517 por D. Rodrigo Ponce de León, señor de Marchena y Duque de Arcos. La iglesia ha perdido sus capillas laterales, quedándole únicamente su gran nave central. 

La Plaza Ducal fue plaza de armas del castillo. Durante siglos fue el pulmón de la ciudad al estar situada cerca de palacio y albergar el concejo de la villa. En ella solían celebrarse fiestas, representaciones corral de comedias y, sobre todo, corridas de toros. Actualmente el Viernes Santo tiene lugar en ella la celebración religiosa del Mandato.

La actual iglesia de Santa Clara es lo que hoy queda del desaparecido convento del mismo nombre, un antiguo monasterio de madres clarisas fundado en el año 1498 por las hermanas Juana y Elvira González de Lucenilla y de Benjumea.

La iglesia fue originariamente una obra mudéjar, de la que aún se conserva la portada, fechable en los primeros años del siglo XVI. Está realizada en ladrillo y es de planta de cruz latina de una sola nave cubierta con bóveda de medio cañón de lunetos.

Monasterio fundado en 1631 por Rodrigo Ponce de León, IV duque de Arcos. Durante siete años estuvo ubicado en diversas dependencias hasta que los señores de Marchena decidieron situarlo en el recinto ducal.